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Según Ever Ruiz, regidor de Jesús María en 2007, cuando el Ministerio Público investigaba a Ocrospoma, por los supuestos cobros a una empresa, la hoy candidata a la alcaldía de Lima, Lourdes Flores, en su calidad de presidenta del PPC, recomendó que se pida su vacancia del cargo.

El regidor -que entonces estaba en las filas del PPC-, dice que, a pesar de eso, ahora Flores ha “impuesto a dedo” a Ocrospoma como el candidato distrital. “Ante la comisión seleccionadora elegida en las elecciones internas, ella pidió que él (Ocrospoma) sea el candidato”, reveló.

DETALLE

Este diario trató de recoger la versión de Ocrospoma, quien, según su jefe de prensa, no quiere pronunciarse personalmente sobre el caso; sin embargo, a través de una nota de prensa, niega irregularidades y atribuye la denuncia a la coyuntura electoral. Allí se señala que destituyó al gerente de administración y el cese temporal por el lapso de un año a los otros dos funcionarios, quienes al término de su sanción no volvieron a ser contratados por la municipalidad. 

El alcalde de Jesús María y candidato reeleccionista del Partido Popular Cristiano (PPC), Enrique Ocrospoma, tiene mucho que responder sobre irregularidades en su gestión, según un informe de la Contraloría –al que LA PRIMERA tuvo acceso-, el cual indica que el funcionario edil habría dispuesto más de un millón de soles en efectivo sin rendir cuentas en su momento.

De acuerdo con el documento, elaborado por la compañía Chávez Escobar y Asociados S.C. Auditores y Consultores, en diciembre del 2007 el municipio ordenó el retiro de S/.1’049,989 sin cumplir con la afectación presupuestal, registro contable y rendición oportuna.

Para retirar el dinero fueron girados seis cheques a nombre de Julio Zevallos Rodríguez, ex cajero central del municipio, con cargo a una cuenta corriente del Scotiabank, los cuales fueron cobrados entre el 21 y el 26 de diciembre del citado año.

Según el informe, el retiro se realizó mediante cuatro resoluciones expedidas el 21 de diciembre del 2007 por la Gerencia de Administración, a cargo Marko Céspedes Ventura, las cuales autorizan el cobro “por encargo”.

El dinero -según la Gerencia de Administración-, estaba destinado a mejoramiento del ornato, implementación de la policía municipal y otras campañas que debían realizarse al cierre de dicho año.

Irregularidades

Lo grave del caso es que, además de expedir las resoluciones, Céspedes –hombre de confianza de Ocrospoma-, también autorizó, solicitó las cotizaciones, aprobó las propuestas económicas, otorgó la conformidad y dispuso el pago en efectivo del millón de soles.

Según los auditores, la operación registró una serie de irregularidades como soslayar la Ley de Adquisiciones, al no haberse realizado los procesos de selección y carecer de cobertura presupuestal ni registro contable.

Según refieren la regidores distritales, Jessica Urquiza y Ever Ruiz, todas estas irregularidades fueron vistas por la Contraloría, que encargó a Chávez Escobar y Asociados S. C. Auditores y Consultores, auditar lo denunciado, pero la administración de Ocrospoma interpuso en diciembre del 2008 ante el Tribunal Constitucional una demanda de hábeas corpus, la cual fue declarada improcedente en setiembre del año pasado.

La rendición de cuentas por el gasto –que según la ley debe hacerse después de tres días-, no la hizo el ex cajero Zevallos, sino Marko Céspedes, hombre cercano al alcalde, seis meses después.

Duplicidad

Ese tiempo, señala la regidora, fue aprovechado para “fabricar” la documentación que justifique la utilización del millón según los requerimientos de las resoluciones emitidas por Céspedes.

Así se tiene por ejemplo que la placa de rodaje consignada en una guía de remisión que transportaba pintura corresponde a un automóvil, o que el propietario de un vehículo consignado en otras dos guías de remisión diga que jamás prestó ningún servicio a la municipalidad de Jesús María.

También que una empresa que brinda servicio de riego con cisterna cobre en diciembre su factura, sin embargo la inscripción de esta en la Sunat data de un mes después.

En otro informe, la Contraloría encuentra irregularidades a Oswaldo Sánchez Neyra, subgerente de Gestión Ambiental y ahora candidato de Somos Perú a la alcaldía del distrito, por haber solicitado servicios de mejoramiento de ornato y parques y jardines, por un valor total superior a los 400 mil soles, cuando estos servicios ya habían sido prestados y llevaban incluso su firma dando la conformidad del mismo.

Lo cierto es que el caso aún lo tiene la Contraloría, que aún no presenta informe final al ministerio Público. Según la regidora Urquiza, hay presiones para que el documento que incrimina a Ocrospoma en este caso no salga a la luz.

Salvado por fiscal

Los cuestionamientos a Enrique Ocrospoma no son nuevos, pues cuando fue regidor de Jesús María fue acusado y denunciado ante el ministerio Público como autor del delito de concusión.

Según la denuncia, representantes de la empresa Innovaciones Tecnológicas del Medio Ambiente SAC acusaron al hoy alcalde de Jesús María, de abusar de su cargo de regidor para obligarlos al pago de 5 mil dólares a fin de que el Concejo Municipal no se oponga ni perturbe la continuidad de los servicios realizados por la citada empresa (entonces Tour Car S.A).

Estos pagos se realizaron a personas allegadas a Ocrospoma, entre ellas a Christiam Céspedes Ventura, hermano del antes citado, Marko Céspedes, su gerente de administración, sostiene la denuncia.

Pese a las pruebas que sustentaron la denuncia, ésta fue archivada por la fiscal Luisa García Gatty, de la Tercera Fiscalía Superior en lo Penal, que resolvió a favor de Ocrospoma. La Fiscalía Suprema de Control Interno le abrió proceso disciplinario a la fiscal García Gatty por presuntas “irregularidades en el ejercicio de sus funciones”.

Helio Ramos

Redacción